Tarde o temprano sucedería. La implementación tecnológica digital en los automóviles abrió nuevas opciones para la experiencia de usuario pero también significó la puerta de entrada para los cobros adicionales. En un inicio se pensó como un trato justo pues se trataba de opciones multimedia que se pueden o no desear y usar, pero la dirección que se está tomando raya en lo polémico pues ahora se cobra por funciones relacionadas con el manejo que deberían estar ahí, más tratándose de marcas de lujo.
Continuar leyendo »
0 Comentarios
Comentarios recomendados
No hay comentarios para mostrar