Generalmente, se habla de Candy Crush desde el éxito que ha tenido en dispositivos móviles y como la auténtica joya de la corona que busca Microsoft al comprar Activision Blizzard King o tal vez desde el estigma al ser un título jugador sin cesar por millones en el mundo. Sin embargo, esta vez el título de King se ha visto envuelto en la polémica debido a una prohibición del gobierno francés.